Nos encontramos de nuevo con Maqroll el Gaviero, él que no tiene puerto seguro en la vida, sino lo que tiene debajo de sus pies por un momento, hasta el próximo. Vive en La Plata, un puerto fluvial, en la casa de una ciega con quién se desarrolla una amistad basada en la confianza recíproca de los que han vivido mucho o que han sido testigos de los caminos singulares de la vida.
Anda como siempre con dos livros: la traducción francesa de la Vida de San Francisco de Asís, y las cartas del príncipe de Ligne, también en francés. Y como siempre, elige trabajar en una empresa dudosa dirigida por un tal Jan van Branden, supuestamente ingeniero ferroviario belga, que se expresa en una mezcla de flamenco y de inglés. La tarea consiste en transportar cajas de material con mulas por el páramo, para lo alto de la cuchilla del Tambo, hasta el campamento de los obreros.
Él va conocerse con gentes leales, además de doña Empera, la dueña de su habitación: don Aníbal y su indefectible amistad naciente, Amparo María, un amor inesperado que le recuerda otras mujeres importantes en su vida, el capitán Segura, figura militar clásica en los libros de Álvaro Mutis, recto y justo, pero al mismo tiempo confinado en su visión de un mundo dividido entre civiles y gente de uniforme.
Es seguir viviendo lo que me cuesta trabajo, no morir. La Plata me pareció lugar ideal para detener, así fuera por un tiempo, ese ir dando tumbos de un lado a otro que ya me tiene hastiado. La cama de guadua en casa de la ciega, el río que pasa por debajo y me ayuda a olvidar, ciertas noches de sobresalto cuando los recuerdos toman cuerpo y me piden cuentas, el alcohol reparador y cómplice en la cantina, al que acudo cuando la lucha conmigo mismo se hace más dura; eso es todo lo que pido a ese lugar en donde nadie me conoce ni con nadie tengo cuentas por saldar. Pero hay un ángel de la guarda diabólico que me obliga a emprender necias empresas, a participar en las de mis semejantes, mezclarme con ellos y sentirme dueño de una exigua parcela de su destino. Así caí en este cuento del ferrocarril.Un bel morir (ediciones Mondadori, 1989, 129 páginas), escrito por Álvaro Mutis (Bogotá, 1923 – Ciudad de México, 2013), es el tercero volumen de la serie de libros centrado en Maqroll, el primero siendo La Nieve del Almirante y el segundo Ilona llega con la lluvia.
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